A lo largo de los últimos años, la cuestión del cambio climático ha ido adquiriendo cada vez más relevancia en la opinión pública. Por ello, se han ido diseñando – en los distintos espacios de la esfera pública y privada – diversas estrategias que apuntan, directamente, al cuidado del Medio Ambiente. Claro está que esta tendencia no ha escapado al campo de la ingeniería, debiendo exigírsele a esta, la conformación de nuevos mecanismos de desarrollo tecnológico que resulten mucho más sustentables.
En la actualidad, podríamos reconocer, como parte de este andamiaje por la sustentabilidad, el desarrollo que se ha ido observando en los últimos años respecto a la formación de “supercondensadores”.
Supercondensadores, ingeniería sustentable
Recientemente, investigadores, científicos y especialistas del ámbito de la ingeniería del Instituto Tecnológico de Massachusetts, en Estados Unidos, han dado lugar al desarrollo de supercondensadores. Estos, consisten en dispositivos de almacenamiento de energía, pero que no se basan en la utilización de carbono. Antes de ello, la gran mayoría de los supercondensadores hacían uso de este componente, lo cual requería de la aplicación de altas temperaturas y de la utilización de sustancias peligrosas y nocivas para el ambiente.
El equipo del Instituto Tecnológico de Massachusetts, ha logrado encontrar una serie de materiales, funcionales para estos dispositivos, sin necesidad de acudir al carbono.
Una de las ventajas fundamentales con que cuenta este nuevo tipo de material, radica en la posibilidad de producirlo en condiciones mucho más seguras que en el caso del carbono.
El futuro de la sustentabilidad
Los supercondensadores sin utilización de carbono, son capaces de almacenar cantidades extremadamente grandes de energía. Por ello, se estima que podrían ser grandes aliados al momento de convertir energías renovables en algo que resulte práctico para ser implantado universalmente como la fuente esencial de energía.
Una de las maneras que los especialistas en materia de ingeniería estipulan, tiene que ver con proporcionar un almacenamiento a escala de red eléctrica que pueda abastecer a grandes poblaciones en contextos de mucha demanda de servicio. Esto podría lograrse debido a que los supercondensadores podrían almacenar el excedente de energía en contextos de poca demanda, para su posterior utilización.
Se estima que estos nuevos condensadores han alcanzado ya superar el rendimiento de las versiones a base de carbono. Uno de estos aumentos en el rendimiento se relaciona con la capacidad de estas nuevas versiones de soportar elevados números de ciclos de carga y descarga.
Como hemos podido observar, en el contexto actual, la ingeniería pareciera traer consigo nuevas respuestas a la necesidad global de generar nuevas estrategias de desarrollo sustentable. Habremos de ver con optimismo estos avances y las soluciones que los mismos puedan traer para nuestro entorno y para todos nosotros que lo habitamos.
