Digitalización, robotización, automatización, sostenibilidad, diversidad, procesos en remoto, cliente en el centro. La COVID-19 ha actuado de catalizador hacia un entorno nuevo que obliga a las empresas a abandonar funciones obsoletas y actualizar sus plantillas mediante la formación.
En este punto de la historia, ya sabemos que el cambio tecnológico se está acelerando tanto en las sociedades como en las organizaciones. Estos cambios sin precedentes en los que todo se puede conectar a través de Internet son parte de lo que se conoce como Cuarta Revolución Industrial.
Para sobrevivir a estas transformaciones, es necesario saber liderarlas. Las empresas inteligentes saben que deben introducir tecnología disruptiva en sus procesos y diseñar un plan de desarrollo de talento humano para que puedan aprovechar los beneficios de esta revolución a su favor.
Los empleados buscan adquirir nuevas competencias (upskilling) y reciclarse profesionalmente (reskilling) para alcanzar las futuras oportunidades profesionales que están por venir. En el blog de Dynatec ya hemos abordado anteriormente en nuestro post Upskilling y Reskilling: cómo prepararse para el futuro
Aunque la cuestión parece sencilla no lo es en absoluto, ya que el mundo está inmerso en un cambio acelerado, que es el incremento en la tasa de progreso tecnológico que produce cambios más rápidos y profundos.
El potencial disruptivo de estas tecnologías es tremendo debido a un efecto que se conoce como convergencia acelerada, según la cual a medida que la tecnología continúe creciendo de forma exponencial, las interacciones entre los diferentes subgrupos de la tecnología crearán oportunidades sumamente interesantes, algunas de ellas dentro de nuevas economías como la cripto economía.
La mitad de los empleados tendrán que reciclarse antes de 2030.
Así es y eso les supondrá de media seis meses de estudio, según el World Economic Forum. Otra encuesta internacional afirma que el 80% de los comités de dirección de las compañías ha de mejorar en capacidades.
Más datos relevantes: entre 75 y 375 millones de trabajadores, es decir, del 3% al 14% de la fuerza laboral mundial, cambiarán de categoría ocupacional para el año 2030 como consecuencia de la automatización, la inteligencia artificial y la digitalización, según el estudio Jobs lost, jobs gained: workforce transitions in a time of automation, elaborado por McKinsey Global Institute.
Y es que, el avance de la tecnología en los últimos años, especialmente tras la crisis sanitaria, ha crecido de tal forma que existen empleados que creen que no van a estar preparados para los trabajos del futuro. En concreto, 4 de cada 10 trabajadores en todo el mundo aseguran que ahora están más alarmados por la automatización de los puestos de trabajo que antes de la pandemia, tal y como revela el estudio Decoding Global Reskilling and Career Paths, publicado en 2021 por BCG y The Network.
Por ello, si se quiere mantener el empleo con un perfil competente y diferenciador o crecer a nivel profesional, es necesario apostar por un aprendizaje continuo y adaptarse a las diferentes exigencias del mercado.
El RESKILLING contra la obsolescencia
Resulta cada vez más evidente que estudiar una carrera profesional no es suficiente si no somos capaces de continuar aprendiendo. Y para que tus habilidades o las de tu equipo no queden obsoletas, empezar a aplicar el reskilling es fundamental.
También llamado reciclaje laboral, el reskilling se refiere al aprendizaje constante de nuevas habilidades con el objetivo de mantenernos al día con las nuevas tecnologías y tendencias del mercado.
Según el Foro Económico Mundial (WEF), más de la mitad de las niñas y niños que estudian hoy en la educación primaria o básica tendrán en el futuro una profesión que aún no existe. Esto también tiene que ver con la automatización del empleo, donde se espera que gracias a la tecnología las máquinas sustituyan a los trabajadores.
El aprendizaje tecnológico, clave para el trabajo del futuro
Los constantes cambios en el mundo digital obligan a empresas y trabajadores a apostar por la formación en soluciones innovadoras. El ritmo de cambio en el entorno laboral actual no tiene parangón. Debido en gran parte a los continuos trastornos empresariales y a las nuevas necesidades por la pandemia, el 58% de la mano de obra necesitará nuevas competencias para efectuar su trabajo con éxito, según una reciente encuesta de Gartner HR Research.
Las tecnologías y la digitalización son cada vez más protagonistas, subrayan en The Valley, donde indican que la demanda de capacidades técnicas y soft skills (habilidades blandas) hacen necesaria la formación especializada en negocios y marketing digital, analítica de datos, digitalización de recursos humanos, gestión de productos digitales y programación, entre otras.
Amazon Go y la cajera que se quedó sin trabajo
¿Tu trabajo consiste en realizar acciones repetitivas y mecanizadas? Pues la mala noticia es que un robot acabará haciendo el trabajo por ti. Cualquier trabajo que pueda hacer una máquina, Lo acabará haciendo una máquina.
Ya está ocurriendo…. Hace años el primer GONG lo dio Amazon Go. Entras a la tienda, coges lo que quieres comprar, y te vas. Como si se tratara de un “simpa”, pero los productos que adquieres se facturan automáticamente a tu cuenta Amazon. Todo esto es posible a través del reconocimiento facial, la visión artificial y el machine learning.
Efectivamente, si las líneas de caja desaparecen, el puesto de cajero y cajera de supermercado también va a desaparecer. Lo realmente preocupante es que la gente no pueda ver más allá y que se ponga el grito en el cielo por esta consecuencia cortoplacista. ¿Sabéis qué? Para que apareciera el puesto de trabajo de “cajera y cajero del súper” también se destruyeron puestos de trabajo previos en el pequeño comercio local.
Las líneas de caja llevan con nosotros unas cuantas décadas, que no se trata de un elemento milenario de nuestra cultura que debemos proteger a toda costa, ni va a venir la UNESCO a rescatar las cajas de los supermercados. Los supermercados sin cajeros de Amazon llegarán a España. Tras su paso por Estados Unidos y Reino Unido, el gigante del ecommerce quiere fortalecer su presencia física en Europa y planea abrir un centenar de sus tiendas sin cajeros en España, Alemania e Italia, entre 2023 y 2024, según explica Info Retail.
Lo mismo está ya ocurriendo por ejemplo en el Leroy Merlín, actualmente si vais, veréis pocas cajetas y la zona de cajas automatizadas, con gente haciendo cola.
El mundo está evolucionando a una velocidad de vértigo y unos puestos de trabajo se vuelven inútiles al mismo tiempo que surgen otras necesidades. Pero esta es la clave: siempre surgen otras necesidades. De ahí la necesidad de reciclarse continuamente y nunca dejar de aprender.
La automatización y las máquinas. Estos son los 7 puestos de trabajo que podrán desaparecer
Los cambios en el mundo laboral llegan cada vez más rápido. Nuestra sociedad de hoy día poco tiene que ver con la generación de nuestros abuelos o bisabuelos. Sabemos que el mercado laboral cambiará aún más rápido a medida que aumente la tecnología y aunque somos conscientes de que algunos trabajos que serán muy demandados en el futuro ni siquiera existen a día de hoy, podemos predecir qué trayectorias profesionales serán las que más se busquen. ¿De qué forma? Gracias a las estadísticas laborales actuales y las tendencias de la industria.
Bajo esa perspectiva, en unos cuantos años algunos empleos podrían finalmente podrán desaparecer como consecuencia de la automatización, reduciendo aún más la oferta laboral en los distintos sectores.
¿Quieres saber que empleos podrían desaparecer con la automatización? De acuerdo con un artículo de REDTEL. estos serían:
1.-Conductores: quienes se dedican a conducir transporte público o trabajan como choferes privados, deben saber que su profesión se encuentra en riesgo a causa de la automatización. Como es bien sabido, las empresas fabricantes de coches están apostando por la conducción autónoma de sus últimos modelos.
2.-Correo postal: la desaparición del correo postal está fuertemente influenciada por el auge de la tecnología porque mayormente las comunicaciones ahora se realizan de forma electrónica, por lo que este sistema de comunicación ha sido dejado a un lado. Aunque en los últimos años el comercio electrónico ha ayudado mucho al correo postal para la entrega de las paqueterías, este de igual forma podría desaparecer porque las empresas más grandes de envíos también trabajan en soluciones autónomas para la entrega de mercancía que se compre mediante la web.
3.–Pescadores. En lugar de salir a mar abierto a realizar la pesca, los peces son criados en granjas con todas las condiciones necesarias para que crezcan hasta su tamaño comercial. Las empresas que se dedican a este sector apuestan a la reducción de costos mediante dichas granjas, gracias a que de esa forma se garantiza que el cambio climático no afectará la vida marina que ahí crían, al tiempo que estarán ofreciendo un producto libre de las insalubridades que puede haber en mar abierto producto de la contaminación.
4.-Imprentas y editoriales. Las impresiones en papel parecen haber pasado ya de moda, por lo que ahora es más frecuente conseguir todo tipo de contenido de forma electrónica, accediendo más rápido a esos contenidos y con la opción de visualizarlos en sus distintos dispositivos disponibles, algo que pone en riesgo los empleos de las editoriales e imprentas.
5.-Cajeros. Son muchas las tiendas que ya poseen 5 o 6 cajas que están custodiadas por una misma persona, la cual solo supervisa y asesora a los clientes sobre el funcionamiento de estas, lo que reduce en más del 70% el trabajo para quienes se dedican a esta profesión. De todas las profesiones mencionadas en este artículo, los cajeros podrían ser los primeros en desaparecer como consecuencia de la automatización.
6.-Agencias de viajes y tele operadores. Ellos también corren el riesgo de que sus empleos desaparezcan con la automatización, por las muchas plataformas, sitios webs y aplicaciones que permiten realizan sus funciones sin la ayuda de un tercero y desde la comodidad de tu hogar u oficina.
7.-Agricultores. La agricultura ha sido una de las actividades que siempre pasó de generación en generación, pero que dado al movimiento constante y la falta de interés por parte de los jóvenes de ejercerla, se ha tenido que automatizar muchos de los procesos que anteriormente eran realizados por una persona, haciendo que se ponga en riesgo de desaparecer como fuente de trabajo.
¿Resucitador de especies extintas? ¿Ingeniero de comida impresa en 3D? ¿Suena insólito?
Un informe del Foro Económico Mundial predice que las máquinas harán más del 50% de toda la mano de obra a nivel mundial para 2025. Si bien muchas de las ocupaciones de hoy continuarán siendo parte del futuro, algunas se transformarán en algo completamente nuevo o desaparecerán por completo.
Merece la pena destacar que los estudiantes que se especializan en áreas de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM) están bien posicionados para sobresalir en el futuro mundo del trabajo.
El auge de la automatización y la globalización de la fuerza laboral requiere que los graduados tengan habilidades flexibles para mantenerse al día con el panorama digital como resolución de problemas, alfabetización digital y numérica, pensamiento crítico y trabajo en equipo.
La explosión del avance digital en las últimas décadas ya ha cambiado la forma en que trabajamos, para siempre. Y está llevando al inicio de nuevas industrias y a la creación de millones de nuevos roles: diseñadores de UX, gestores de redes sociales… Es probable que ocurra lo mismo en los próximos 30 años.
Está claro que los humanos debemos centrarnos en ser proactivos y desarrollar habilidades que actualmente pueden no parecer valiosas o relevantes. En unos cuantos años algunos empleos podrían finalmente podrán desaparecer como consecuencia de la automatización, reduciendo aún más la oferta laboral en los distintos sectores.
Un 52% de los empleos se perderán en España a causa de la automatización en la presente década, según Randstad. El Foro Económico Mundial ya vaticinó hace tres años que en 2022 se crearán en el mundo 133 millones de trabajo. Estos girarán en torno a conceptos como la relación entre los humanos y la IA o la gestión de algoritmos, y todos tendrán algo en común: se adaptarán a una nueva realidad que, hasta ahora, tan solo se dejaba entrever. Creativo, crítico con su realidad y emocionalmente inteligente: así será el trabajador del futuro según los expertos.
En conclusión, el futuro del trabajo está relacionado con la adquisición de nuevas competencias, ya que impacta en la retención y desarrollo de los empleados para el crecimiento organizacional y el posicionamiento estratégico.