Se cree que, con el paso del tiempo han ido apareciendo nuevas enfermedades. Pero hace siglos, las personas morían sin que se llegara a saber por qué. Hoy es mucho más sencillo determinarlo y la lista de enfermedades de las que sabemos es mucho mayor. Sin embargo, no se trata de que con el tiempo se hayan desarrollado muchas nuevas enfermedades, sino que han mejorado sustancialmente los métodos de diagnóstico. Esto ha ocurrido gracias a los avances en tecnología aplicada a la salud.
Más y mejor tecnología para diagnósticos eficaces
No es la primera vez que sale a la luz la creación de robots tan pequeños como para introducirse en el cuerpo humano. Pero nunca antes se había logrado dar con robots de ese tamaño que fueran capaces de percibir con exactitud su entorno. Lo que se presenta ahora es, por primera vez en la historia, un robot del tamaño de una célula que puede ingresar en el organismo, detectar lo que sucede en él, almacenar datos y trabajar sobre ellos. Esto es así gracias a avances significativos en tecnología.
Nos estamos refiriendo a un dispositivo de diagnóstico, una serie de circuitos electrónicos muy pequeños fabricados en material biocompatible. Estos circuitos poseen un tamaño no mayor al de un óvulo humano y están combinados con unas minúsculas partículas que reciben el nombre de coloides. Los coloides pueden permanecer suspendidos en el aire o en el agua por un período de tiempo indefinido. Combinando estas partículas insolubles con un sistema de circuitos complejos, se pretende sentar las bases para realizar viajes de diagnóstico en el interior de cualquier cosa y de cualquier organismo. Se busca que puedan trabajar tanto dentro de tubos de gas y de petróleo, como del sistema digestivo humano.
https://www.mdzol.com/video/806304-robots-del-tamano-de-celulas-para-patrullar-el-cuerpo-humano/Estos experimentos están siendo llevados a cabo por un equipo de investigadores y especialistas a cargo de Volodymyr Koman y Michael Strano. Esto se desarrolla en el interior del Instituto Tecnológico de Massachusetts, en Cambridge, Estados Unidos.
Tecnología, innovación en la salud y ahorro de energía
Algo que se debe destacar acerca de estos robots realmente diminutos, tiene que ver con que son autoenergizables. De esta manera, se facilita la tarea y se logra un importante ahorro energético, ya que no son necesarias las fuentes de energía adicionales, ni externas ni internas. Tanto sus circuitos de memoria como los de computación se mantienen a través de un fotodiodo que es el encargado de brindar la poca energía que los dispositivos necesitan para funcionar.
Muchas son las aplicaciones que se estima que esta innovación sin precedentes en la tecnología para la salud podría obtener. Particularmente se espera su uso en los ambientes productivos como el gas y el petróleo y en el área de la salud. Se espera que, con su utilización finalmente establecida y reglamentada, se podrán obtener diagnósticos más certeros y especialmente precoces ante diferentes tipos de enfermedades. Esto se debe esencialmente a que serán dispositivos capaces de adquirir información concreta desde el propio interior, desde el sitio en el que las cosas no están funcionando como deben.